viernes, septiembre 24, 2010

Después de tantos años este asunto del blog dejó de tener un poco de sentido. Porque ¿para qué un blog? En serio, honestamente: ¿para qué? Y esta es una pregunta que me hago a mí, cada uno tendrá sus motivos. Con sinceridad me respondo. Pero me respondo en silencio, no es algo que tenga ganas de andar publicando. Aunque sí confieso que hasta hace un tiempo cada vez que me hice esa pregunta la respuesta tuvo un poco que ver con levantar tipos y otro poco con recibir aprobación ajena, pero, bueno, esos son simplemente los titulares. La realidad, más allá de ciertas motivaciones que ya perdieron vigencia, es que cada día que pasa me veo más limitada. A esta altura del partido, ¿para quién escribo?, ¿por qué este formato?, ¿aporta?
Ya no escribo para mí ni para un otro, me limito a encriptar y esconder. O, lo que es más común, tomar una pequeñísima parte de la cotidianeidad y adornarla, llenarla de merengue y puntilla; eso no está mal, me divierte, pero no es lo que quiero. Lo que yo quiero es soltar amarras y contarle a quien quiera leer que estoy maravillada con ciertos aspectos de la vida; que estos últimos seis o siete meses me zarandearon tanto que ahora me siento un poco mareada, pero feliz, muy feliz; que aunque la satisfacción vaya colándose por los tajos que ha ido abriendo la neurosis, tengo que seguir en mi lucha activa contra la supremacía del ego, porque se me revira y a la primera que le saco el ojo de encima, me arma quilombo. Quiero escribir sobre reencuentros que me sanan y me hacen brillar la mirada de un modo distinto; y sobre situaciones turbias que sacan lo peor de mí: la manipulación, los celos y las ganas de hacer reventar a todos con sólo abrir la boca y decir un par de cosas.

Elijo, muy a conciencia, callarme. Elijo seguir adornando lo nimio en pos de esconder lo importante. Elijo, con premeditación y tranquilidad, porque sé que se viene la revolución. La siento venir. Si apoyo la oreja en el suelo, siento cómo retumba mi cabeza.
De brazos abiertos la espero.

8 comentarios:

Unknown dijo...

Mira quiero firmar pero mi vieja ya me interrumpió 22 veces, que difícil es bancarla de visita
Me ofusque besos

carlos dijo...

cel es un placer leerte. besos

La Criatura dijo...

"Porque ¿para qué un blog? En serio, honestamente: ¿para qué?"

no tengo ni puta idea... o tengo una idea, pero es muy puta.


mientras tanto, acá, desde este otro lado, disfrutamos sus merengues y sus escondidas

nadie dijo...

obvio que ahora saltamos todos


si se cierra IMPAICIYW se pudre

Y en última instancia...quién te impide hacer lo que queres. eg

Cel dijo...

Petardo, uh, sí, te comprendo el ofusco. mi madre vino a mi casa 3 veces en 3 años, y pienso mantenerlo de esa manera.

carlos, le agradezco!

Criatura, cuando yo tenía una idea muy puta también estaba entusiasmada con el blog.

nadie, cuando sepa bien qué es lo que quiero, se pudre todo.

CMQ dijo...

y... ¿por qué no sueltas amarras y escribes lo que quieres contar de verdad? Es tu blog, son tus letras. Un abrazo.

Cel dijo...

CMQ, primero debería soltar amarras en la vida. el blog sería lo de menos.
otro abrazo

CMQ dijo...

Bueno... supongo que a eso deberíamos aprender todos, tienes razón. Besos.