martes, noviembre 24, 2009

Parece que había una especie de secta que te ofrecía un paraíso en la tierra. No sé en qué terminos me convencían, pero de repente estaba en un lugar lleno de montañas, arroyos y verde, una cosa increíble. Yo vivía en una casita con una mina que era igual a Renee Zellweger en la época en la que no tenía la cara hecha percha y con Ani. Había mucha gente en esta comunidad y no sé bien a qué nos dedicábamos durante el día, eso no era relevante, lo llamativo e importante era que se podía tener sexo sólo una vez por semana. Pero había que tener sexo sí o sí, con quien fuera. Te daban tres horas, durante esas tres horas, se aprovechaba para garchar con quien se tuviera a mano; ah, y también abría una especie de proveeduría donde te vendían golosinas y porquerías, parece que el resto de la semana estaba cerrada.
La consigna era clara, se garchaba hasta las 20 hs, si alguien no estaba en su respectiva cabaña a esa hora, se lo devolvía a la civilización. De hecho, nos pasaban pelis de tipos que habían tenido que volver a la vida normal en la ciudad y terminaban como linyeras, sin poder adaptarse, extrañando la vida comunitaria.
El día que te permitían coger era el viernes. Nos juntaban a todos en una especie de plaza para que los no tenían pareja pudieran relojearse tranquilos. Ani se encontraba con Damián -su novio, en mi sueño y en la vida- y a mí se me acercaba un pelado que tenía una cara increíble. Fundía a negro y estábamos en mi habitación. Mentira, en mis sueños no se funde a negro, pero tenía ganas de decirlo. No teníamos muy buen sexo, pero cada vez que me sonreía, me calentaba automáticamente, así que mucho no me importaba. A las ocho menos cinco se iba de mi cuarto y yo me quedaba dormida.
Al otro día, Renee Zellweger se despertaba gritando. Parece que tenía un problema de personalidades múltiples y lo había apuñalado al pelado de sonrisa divina. El tipo estaba tirado en el jardín, de lo más muerto. Yo me entristecía porque iba a tener que buscarme un nuevo compañero de viernes a la tarde y temía por mi convivencia con la rubia psicótica.

Qué embole esos blogs en los que la gente cuenta sus sueños ¿no? Porque, a quién le importa lo que soñé la noche anterior. Bah, a quién le importa cualquier cosa que pueda llegar a escribir, si de cosas sin importancia estamos hablando.
Ya vendrán tiempos mejores.

6 comentarios:

Ale dijo...

Quien sueña con Renee Zellweger?!?!

Cel dijo...

Ale, bueno, claramente, yo. siempre sueño con actores.

lali balbi dijo...

estos son sueños cel, qué emoción, buen guión, sexo, suspenso, artistas internacionales,
GRACIAS CEL, GRACIAS POR SOÑAR
te adoran mientras duermes
tus fans

Anónimo dijo...

a mi no me importa por eso leo solamente lo del final

Penny Lane dijo...

La aparicionde Rene es inquietante... el pelado q cuando sonrie la vida misma sonrie es genial. Lo imaginé y hasta creo que tambien me calentó un toque.

La vida comunitaria es mi sueño... sería honestamente espléndido que tu sueño se haga realidad y que por supuesto yo, este en la comunidad de las citas de los viernes a la tarde y no como linyera enla vida real no?
ahh tambien le agregaria unas notas de maconha a la alegoría.
Bueno, Saludos
and Keep on dreaming.

Cel dijo...

secre, seguiré soñando, entonces. me debo a mi público (digo mientras saludo como las reinas de belleza)

penny lane, no sé cómo te lo habrás imaginado, pero si es más o menos parecido al mío, es lógico que te hayas hasta calentado.
la vida en comunidad suena idealmente maravillosa... aunque me molestaría un poco que todo el mundo me conociera.
las notas de maconha estuvieron antes de irme a dormir. son los mejores sueños.