domingo, abril 04, 2010

Tuve que mediar conmigo misma y llegué a un buen acuerdo.
A veces me despierto de las siestas con unas gansadas tremendas como ideas, y desde la mirada somnolienta se me hacen brillantes, pero debo poner paños fríos.
Raciocinio. Ya no más estrategia, la estrategia sólo me aleja del deseo. Se trata de evaluar variables y constantes. La constante soy yo queriendo siempre lo mismo más allá de que los hechos se empeñen en demostrarme que es probable que no valga la pena intentar nada más. Pero soy testaruda y mi nivel de tolerancia al fracaso fluctúa incesante, tanto, que no me da respiro.
Hoy me desperté de la mini siesta sintiéndome invencible, aplanadora, a mi qué, que quién es quién para no dejarme hacer y decir lo que se me cante. Me preparé un té chai y cada sorbito venía acompañado de una frase. Calma, chicha, que siempre abrís la bocota y después te querés matar. Bancate dos horitas, si en dos horitas pensás igual, avanti. Ahora hacete la tarea de latín y después te fijás qué onda. Y así, hasta que se terminó el té.
Después fui a comprarme una coca, complemento de ferné, para gratificarme por haber separado en sílabas los primeros versos de la Eneida y haber diferenciado las vocales cortas de las largas, y mientras abría la puerta de casa terminé de decidirlo.
No hay otra, señores. Cuando llega el momento, la conciliación entre el lado más salvaje y el más miedoso es posible, hay un punto de encuentro. El punto de encuentro es el momento. El momento es todo.
Un pequeño paso para la historia de la humanidad, un momento de absoluta satisfacción y paz interior para Cel.







Claro que cinco horas después aparece el otro momento. El momento de hacerme otro té y decirme, sorbito tras sorbito, que no puedo ser tan hijita del rigor.

3 comentarios:

lali balbi dijo...

escuchame una cosita hiji del rigor: yo me hice un té, me senté, me hice otro té, me bajé medio kilo de pascua y...no te puedo diferenciar una sola vocal!!!!!! estoy en el horno de virgilio

Cel dijo...

secre darling, yo lo terminé... lo que me cuesta un cacho es lo separar en sílabas, pero no me desmoralicé, marqué todo lo que no salió y el martes esperaré a su lado la explicación pertinente. no bajemos los brazos, compañera.

lali balbi dijo...

te quiero cel! que bueno que nos demos ANIMUS!!!!