lunes, mayo 03, 2010

Después de mucho tiempo me vengo a dar cuenta de que no soy la misma. La torpeza, la timidez, el temblequeo y la manipulación ya casi que no están. Y si bien sigo siendo bastante inexperta e ineficaz en esto de "el juego", y me rompe las pelotas el código tácito de las señoritas-medidas-que-se-saben-manejar, no soy la misma.
Me tomé más de dos años para esto y, por fin, veo los resultados. Unos cuantos meses para terminar con una relación ya irremontable. Otros tantos para no querer que me toquen ni un pelo. Y un período de transición en el que me reencontré con mi parte más divertida y descomprometida. Y ahora, ahora esto.
Ya no soy la misma. Qué lindo. Qué alivio.

5 comentarios:

Ale dijo...

Yo tambion odio el juego... Pero caigo siempre. Una mierda.

Cel dijo...

Igual, aunque lo odies, no dejás de ser buen jugador.

Soria dijo...

omnia mutantur, nihil inherit

lali balbi dijo...

play boy, play girl

Cel dijo...

Soria, y qué bueno, qué bueno que así sea.

secre, me lo imaginé con la música de la canción esa de los chemical brothers. here we go!